Katmandú - Nyalam

 El día de hoy ha sido una pérdida de tiempo y un día muy largo, tengo la sensación de haber perdido un día de mis vacaciones, pero por otro lado era la única manera que teníamos de llegar hasta el Tíbet.

A las 5.30 de la mañana se ha pasado Shishir por el hotel a buscarnos para ir a la parada del autobús en frente del fireandice. Aquí es donde ya definitivamente nos despedimos de Shishir, ya no le volvemos a ver. Nos ha dado mucha pena, porque al igual que el año pasado se ha portado de maravilla con nosotros, es un tipo genial, y nos ha ganado como amigos para siempre, Thank Sathi.


Enseguida nos ponemos en camino hacia la frontera china, hemos tenido mucha suerte con el autobús, pues era bastante nuevo, yo calculo que fabricado en el 68, pero se tiene que ver el resto de autobuses que circulan por Nepal. Los asientos estaban sucios y había un agujero en el suelo, pero hemos ido tranquilos ya que solamente cabía por él un brazo. Uno de los pasajeros ha tenido que ir todo el trayecto recostado porque su respaldo estaba roto, vamos una chatarra de autobús, y así 6 horas dentro de él. 

Hemos ido por la carretera Arniko, que es la carretera que une Nepal con Tíbet y China, esta carretera también se conoce como carretera de la amistad, ya que une Katmandú con Lhasa. Es una carretera muy propensa a los corrimientos de tierra (en la parte Nepalí),  sobre el trayecto que vamos a decir, sí ya vimos el año pasado como son las carreteras de Nepal. Ha sido un trayecto muy largo, con continuos baches, en dos ocasiones he salido disparado de mi asiento contra el techo, en una de ellas casi me fracturo todas las cervicales, ¡que ostión!. Cada pocos km la policía nos paraba en sus controles y nos registraban el autobús de arriba a abajo. Que viajecito.

El tramo de 865 km de carretera entre Katmandú y Lhasa, es sin duda uno de los más espectaculares del mundo. Desde Katmandú (1300 m de altitud) la carretera asciende suavemente hasta Kodari (1873 m), luego deja Nepal tras subir una empinada pendiente de pronunciadas curvas hasta Ahangmu (2250 m), la población fronteriza Tibetana, y después hasta Nyalam (3750 m). Posteriormente se asciende hasta lo alto de Tong - la (4950 m) y sigue hasta Tiingri (4250 m). Actualmente la totalidad de la carretera del lado Tibetano está asfaltada. El trayecto por esta carretera ha sido cómodo y agradable, salvo porque las autoridades Chinas no dejan a los viajeros independientes viajar por Tíbet, lo que te obliga a sacar un permiso del TTB y a contratar un circuito. Es por ello que encuentras numerosos controles en el camino donde tienes que enseñar tus permisos y pasaporte. Posteriormente pasaremos por el paso Maphu- La (5920 m) hasta la llegada a Lhatse (4350 m). A partir de este momento la carretera ira descendiendo paulatinamente aunque en ocasiones aisladas podamos alcanzar cotas de 5010 m en pasos montañosos, pero lo general será ir descendiendo hasta Shigatse (3900 m), Gyantse (3950 m) y Lhasa (3650 m).

Al llegar al pueblo fronterizo de Kodari, el autobús nos ha dejado a unos 500 m del puente de la amistad, que separa Nepal del Tíbet y donde está la frontera. Pero antes de cruzar esta, hemos tenido que sacarnos el visado Chino en la oficina de la inmigración. Por un momento me he visto en una película en la que un montón de inmigrantes ilegales tratan de cruzar una frontera. Allí estábamos once occidentales recorriendo el último tramo de tierra nepalí con nuestras mochilas, entre un montón de nepaleses que intentaban cruzar la frontera andando.
Ha sido todo muy extraño en la aduana. Un par de policías chinos, con cara de no haber cagado en el último mes y con la simpatía del que se acaba de mear encima nos ha registrado la mochila de arriba a abajo, y para después pasarla por el detector de metales. ¡Señores, que solo vengo de vacaciones!

Lo primero que hemos hecho nada más cruzar la frontera ha sido cambiar nuestros euros en yuanes, en el mercado negro. Allí estaba yo regateando a unas cuantas chinas que me querían engañar, y que seguro que finalmente me engañaron.
Al otro lado de la frontera es donde nos hemos juntado todos los que desde este momento seremos compañeros de viaje, y nuestro guía. Un francés, un belga, dos italianos, una lituana, una inglesa, cuatro sudafricanos, una argentina y nosotros dos (parece un chiste) seremos los que conformemos este grupo tan vario pinto desde hoy hasta el 6 de Octubre. Todos ellos viajan por libre como nosotros, pero como ya he comentado anteriormente, para entrar en Tíbet, solamente lo puedes hacer en grupo, así que nuestros guías en Nepal nos han juntado a todos para que conformemos ese grupo "legal", que nos dé acceso a Tíbet.

Nuestra primera experiencia con la comida China ha sido en la localidad cercana a la frontera, Zhangmu, y ha sido desigual. Nerea se ha intentado comer un arroz frito con verduras, donde todo sabía igual gracias a la cantidad de picante que llevaba. No sabías si lo que comías era un grano de arroz, un guisante o una guindilla entera. Yo he tomado una sopa de tomate, que estaba bastante rica, pero que picaba una barbaridad, se me han quedado los labios como pimientos morrones. Para segundo he pedido unos rollitos primavera de pollo, pero solamente me han servido uno.....pero del tamaño de una barra de pan, y rellenos de fideos. ¿Y el pollo?¿donde está el pollo? el precio de la comida ha compensado nuestra "sorpresa", por menos de 6 euros hemos comido los dos.

Tras reponer fuerzas, hemos continuado nuestro viaje, en una furgoneta toyota, en bastante mejor estado que el autobús en el que hemos llegado hasta aquí..El trayecto hasta Nyalam es una ruta de 30 km bastante bonita. Asciende vertiginosamente hasta la meseta tibetana, y se interna en una profunda garganta de bosques de hoja perenne, cascadas y caudalosos ríos. Lo más espectacular, posiblemente serán las cascadas de unos 200 metros que vas viendo a lo largo de todo el trayecto.

Nyalam, atardecer
A última hora de la tarde hemos llegado a Nyalam. Es una población de una sola calle y que carece de ningún interés turístico. Simplemente es una población para  hacer noche. No hay nada salvo perros para ver por la calle. La mayoría de las tiendas están cerradas al igual que ocurre con los restaurantes. Y hace un frío de narices.

Después de registrarnos en el alojamiento, hemos salido a dar una vuelta por el pueblo. En 30 minutos nos hemos recorrido la calle de un extremo a otro, así que hemos decidido ir a cenar, visto que no tenemos más que hacer aquí. Hemos tenido problemas para encontrar un local donde nos diesen la cena, así que hemos acabado con Andrea (la chica argentina del grupo) cenando en el restaurante del alojamiento, atendidos por dos tibetanas que no hablaban una sola palabra de inglés, y a las que les daba igual que pidieses, porque ellas te traían lo que les daba la gana, al final hemos cenado lo que ellas han querido.

Del alojamiento mejor ni hablamos, que ha sido un día muy largo, estamos muy cansados y con mucho frío, así que me voy al saco.



Fuente wikiloc


Distancia recorrida: 150,53 kilómetros 
Altitud min: 663 metros, max: 2.193 metros
Desnivel acum. subiendo: 2.662 metros, bajando: 1.783 metros