Nyalam - Shigatse

El día de hoy sí que ha sido un día totalmente perdido y sobre el que apenas se puede escribir nada, salvo que hemos estado nueve horas de recorrido metidos dentro de la furgoneta. Lo más destacable del día de hoy han sido las vistas, que en ocasiones eran espectaculares. Hemos podido ver con claridad el Everest y el Makalu (8464m).

Lo que no me esperaba de la región que estamos visitando es que fuese tan árida. No hay vegetación por ningún lado, es todo amarillo y llano, se nota que estamos en la meseta del Tíbet.
Paso Nyalam 
Durante el trayecto hemos cruzado un par de pasos muy llamativos, el paso Nyalam (3800m) y el paso Lalung La (5082m), llenos de banderas de la oración, llevando sus plegarias al otro extremo del Tíbet gracias al fuerte viento que allí soplaba. Menos mal que veníamos con la aclimatación hecha desde Nepal, porque algunas personas que venían en el grupo se han puesto malísimas como consecuencia de la rapidez con la que hemos ganado tanta altitud.

La primera parte del recorrido nos ha llevado hasta Lhatse, una inhóspita población que no tiene ningún interés, más allá de ser un posible lugar para comer. Solamente posee una calle y una pequeña plaza.

fuente wikiloc
Distancia recorrida: 299,44 kilómetros 
Altitud min: 3.626 metros, max: 5.233 metros
Desnivel acum. subiendo: 2.691 metros, bajando: 2.298 metros


Paso Lalung La
La segunda parte del recorrido de hoy nos lleva hasta Shigatse, donde haremos noche. Shigatse es la segunda población más grande del Tíbet con cerca de 80000 habitantes. Esta población  ha sido la sede del Panchen Lama  (los segundos lamas de grado más alto del país y que compiten en autoridad con los dalái lama) hasta 1989. Realmente esta ciudad es un importante centro comercial y administrativo, que mañana visitaremos más a fondo ya que tiene un importante monasterio.

fuente wikiloc
Distancia recorrida: 151,96 kilómetros 
Altitud min: 3.849 metros, max: 4.513 metros
Desnivel acum. subiendo: 834 metros, bajando: 960 metros


La anécdota desagradable del día la ha puesto el guía, cuando nos ha comentado que no tenía los billetes del avión de regreso a Katmandú. ¡Pero cómo que no, si nos los tienes que facilitar tú! Aquí se ha revolucionado un poco la gente.
A la llegada al hotel de Shigatse, nos ha comentado, tranquilamente y sin agobiarse, que no tenemos los vuelos reservados para el día 15 y que tendremos que volar el 14. ¿Que dices? de eso nada majete, yo he pagado hasta el 15 y no me voy antes. Se ha montado un poco de jaleo en la recepción del hotel, pero no ha llegado a más.
Para intentar solucionar el tema, hemos decidido irnos a cenar todos juntos y tratar el tema. Hemos elegido un chino para cenar, por eso de que no tienen cubiertos, y con la tensión que se respira igual alguien se lleva un susto con los cuchillos. Ha sido una situación surrealista, porque el guía es un jetas y quiere que nosotros nos busquemos la vida para solucionar el tema, cuando ese debería ser su trabajo. Pero durante la discusión a habido un momento álgido, cuando al guía se le ha ocurrido reírse de mi inglés. En mí segundo ¡me cagüen la ostia! se ha dado cuenta de que esto iba en serio y de que estaba bailando con la muerte. Aquí sí que ya se ha montado una buena bronca.

No sé en que concluirá todo esto, no sé si tendremos vuelo o tendremos que quedarnos en este país de okupas, pero yo voy a intentar disfrutar de los días que esté aquí de vacaciones, que para eso he venido.